Un proyecto coreográfico que se inspira en la técnica japonesa del plegado de papel. Siguiendo estrategias precisas, el papel plegado crea diferentes formas (animales, objetos y flores) y adquiere diferentes significados. Esta continua transformación y transición entre formas es uno de los elementos clave de esta obra coreográfica. El cuerpo de la bailarina se modela igual que la hoja de papel en la práctica del origami. Pasando por la elaboración de formas, que recuerdan claramente a las del origami, la bailarina se involucra en la búsqueda de su forma ideal que la llevará a la obsesión. En este punto, pierde su objetivo inicial y se rinde a la constatación de que no hay una forma ideal que encarnar, sino sólo una forma de vivir el presente como lo que somos.

Colaboración con el Festival Corto in Danza (Cagliari)